Trash the Dress en Punta Cana: Una sesión de amor eterno en la playa del Dreams Royal Beach (antes Now Larimar)
- Punta Cana Foto RD
- 29 nov
- 3 Min. de lectura

Un inicio lleno de calma y conexión frente al mar Caribe
En Punta Cana, cada historia de amor llega a la playa con una energía única.
Esta sesión trash the dress tuvo lugar en una de las zonas más románticas de Bávaro, en la playa del hotel Dreams Royal Beach Punta Cana (antes conocido como Now Larimar).
Sus playas tranquilas, su arena suave y la luz cálida del Caribe crearon el escenario perfecto para una sesión llena de conexión, alegría y momentos inolvidables.

Gestos reales, miradas intensas y libertad para sentir
Desde los primeros minutos, la conexión entre ellos era pura armonía.
Acostados en la arena, tomados de la mano y envueltos por el sonido de las olas, parecía que el mundo se detenía.
La magia de una sesión trash the dress en Punta Cana siempre empieza así: con calma, autenticidad y mucha ternura.

El mar Caribe los acompañó en uno de los momentos más simbólicos de la sesión: caminar por el agua tomados de la mano, mirándose como si todo a su alrededor desapareciera.
Cada paso contaba una historia, cada mirada era una promesa.
Es en esos detalles donde se ve la esencia de un amor sincero.

Cada gesto hablaba de confianza, de esa conexión silenciosa que solo existe entre dos personas que se eligen día tras día. Miradas que cuentan mucho más que palabras.


Emociones puras capturadas en imágenes atemporales
En Punta Cana, las sesiones trash the dress tienen un encanto especial:
no hay reglas,
no hay presión,
solo libertad para sentir.
Los abrazos, los besos, los gestos naturales… todo fluye cuando el entorno inspira tanto.
Sus vestidos de boda mojados, la arena pegada a la piel y la luz dorada del atardecer crearon una atmósfera imposible de recrear en otro lugar.


Movimiento, risas y perspectivas únicas en la playa
Algunas imágenes se transformaron en blanco y negro, resaltando lo esencial:
la emoción pura.
Sin distracciones, sin colores, solo el amor en su forma más honesta.
Un beso suave, un abrazo prolongado, un instante que se siente eterno.


No todo es solemnidad en una sesión trash the dress.
También hay momentos de diversión genuina, como cuando rodaron en la arena entre risas, sin importar lo sucios que terminaran.
La felicidad verdadera siempre se ve mejor cuando es espontánea.


Uno de los momentos más icónicos fue su “dip kiss”, ese beso inclinado estilo final de baile donde la pasión y la alegría se mezclan con el movimiento.
Un gesto romántico, cinematográfico y perfectamente caribeño.
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Los pies llenos de arena, las manos entrelazadas, los labios casi rozándose…
Cada detalle suma.
Esos pequeños fragmentos de intimidad hacen que una sesión sea única y que las imágenes se vuelvan recuerdos imborrables.


La sesión culminó con fotografías tomadas desde arriba, creando composiciones elegantes y visualmente impactantes.
Dos cabezas unidas, dos cuerpos en direcciones opuestas y un mar tranquilo a pocos pasos: la geometría del amor vista desde otra perspectiva.
Las sesiones trash the dress en Punta Cana tienen un encanto muy especial.
Son libres, emotivas y profundamente auténticas.
No se trata de grandes bodas, sino de sentimientos reales, caricias sinceras y miradas que hablan por sí solas.
La playa del Dreams Royal Beach Punta Cana — antes Now Larimar — sigue siendo uno de los escenarios más hermosos para celebrar el amor en su forma más natural.
Y cada fotografía de esta sesión es una prueba de que los recuerdos más valiosos suelen nacer cuando nadie los espera.















